Hace años atrás comencé a escribir en esta web, para publicar relatos de antaño y recuerdos que uno los trae, ya escritos en su memoria, para disfrutar de esos años de juventud y niñez, o cuando recién comenzábamos nuestra adultez.
Ya explicado el por qué? del nombre, que no corresponde a la Radio como medio de comunicación, sino a un componente usado en los años 50 en nuestras casas, la Radiolina, detergente en polvo para lavar ropa, que junto a la Perlina, más el Azul, hacían la trilogía para que nuestras ropas quedaran limpias y "olorositas" como decía mi abuelita.
Ya con estos antecedentes en mi mente, comenzaría a escribir de los años del siglo pasado, cuando era un niño y todo era un absorber cosas nuevas de este mundo, que en esas décadas de los años 40/50/60 eran de una velocidad impresionante...¡¡imaginen hoy!!, estamos locos.
La teoría (mía), me indica que desde la salida de la fotocopia y el fax (jajajaja), pisaron el acelerador a concho y toda la tecnología se nos vino encima, apurando el diario vivir de muchos, lo que dejó por el camino, la paciencia, la buena convivencia, la vida familiar, el amor, el aceptar la crítica, y resolver los problemas con el diálogo.
Con los celulares, se planteó otra carrera, con la que muchos no estábamos preparados, y volver a empezar con otra tecnología, que a nosotros, los más antiguos, vamos quedando en el camino, a excepción de muchos jóvenes de los 60, que han superado este escollo.
La velocidad con que estamos en este mundo globalizado, no nos deja tiempo para asimilar lo que estamos disfrutando, así se nos acumulan saberes, como también deberes...
Todo lo ponemos en un cambucho, para resolverlo cuando se pueda, hoy ya con pandemia al frente, hemos recuperado algo de antaño, los almuerzos familiares donde hacemos sobremesa, tomando un bajativo, una agüita o un té. Conversamos de todo e incorporamos a los niños en estos diálogos en la mesa familiar, nos enteramos en que están y colaboramos todos en solucionar los problemas.
Además la pandemia ha destapado la desigualdad con mucha crudeza, y vemos como todo el peso de esta hecatombe la han soportado los trabajadores, debido a que los que nos gobiernan, solo se preocupan de reactivar la economía, colaborando y ayudando a los empresarios, pero ahí se ve cuantas pymes han quedado fuera de estas ayudas y han tenido que cerrar, dejando una estela de personas sin trabajo.
Ya escribiendo un poco del acontecer nacional, damos por terminado el artículo y nos preparamos a iniciar Los Tiempos de la Radiolina con nuevas ideas, con mucha alegría, incluyendo temas que serán siempre optimista para paliar un poco este quehacer tan complejo.
Un saludo a todos y buena cara para los tiempos que vivimos...
Comentarios